BAILAORES/BAILAORAS · Generación nacida FINALES s. XIX o PRIMERAS DÉCADAS del s. XX




AMAYA, Carmen. Bailaora y cantaora (Barcelona 1913 - Begur (Baix Empordà), 1963). Hija de José Amaya "El Chino", hermana de Paco, Carmen, Leonor, María, Antonia y Antonio Amaya y sobrina de La Faraona, nació en el Somorrostro de Barcelona y aprendió a bailar en el seno familiar y especialmente con su tía La Faraona. Conocida en sus inicios como La Capitana, debutó de pequeña en restaurantes como el Siete Puertas, y en los años veinte formó un cuadro flamenco con su tía La Faraona, La Romerito, El Gato, El Chino y Manolo Bulerías que actuaba en el Bar del Manquet, en las antiguas Drassanes, y en La Taurina, en el Chiringuito de la Porta de la Pau, en el Cangrejo Flamenco y en el Villa Rosa. En 1923 bailó en un local situado en los bajos del Palacio de la Música de Madrid y al año siguiente se incorporó en el elenco de Manuel Vallejo, con quien recorrió toda España. Después de actuar en el Teatro Español de Barcelona, se fue a Granada, donde bailó delante del rey Alfonso XIII, dentro de las actividades organizadas por los Festivales de Cante y Baile Flamenco de la ciudad. En los años siguientes el cuadro flamenco de Carmen Amaya y La Faraona, conocido como Los Amaya, actuó en París en el espectáculo París-Madrid con Raquel Meller. En 1929 lo hizo en el Pabellón Andaluz del Pueblo Español para la Exposición Universal y continuó bailando en la Bodega de Colón y en el Bar del Manquet. En 1933 participó en el espectáculo Instinto y técnica, organizado por Amics de l'Art Nou (ADLAN). A mediados de los años treinta comenzó su carrera cinematográfica con películas taquilleras como La hija de Juan Simón y María de la O, que le proporcionaron fama entre el gran público como estrella de los espectáculos folklóricos. En 1936 fue a la capital argentina para actuar en el Teatro Maravillas, e incorporó en su elenco al guitarrista Ramón Montoya y más tarde Agustín Castellón "Sabicas". A finales de la década de los años treinta realizó diversas giras por América del Sur y Central. En 1941 debutó con éxito en el Beach Comber y el año siguiente en el Carnegie Hall de Nueva York, y emprendió diversas giras por los Estados Unidos con compañía de baile propia, con sus hermanos Paco, María, Antonia y Leonor, Sabicas [...]

[Traducido del catalán, texto original de María Jesús Castro (2003) en Història de la Música Catalana, Valenciana i Balear. Volum IX Diccionari A-H. p. 39-40, Barcelona: Edicions 62]




[Imagen extraída blog de Fernando Orgambides aquí]


 Fue el renombrado crítico Sebastián Gasch, quien se jactaba de haberla descubierto en la taberna La Taurina, el primero en sacarla en los papeles, y con esta carta de presentación, le abriría las puertas de locales como Casa El Manquet, donde se valoraba al flamenco como se merece: 
         "Era gitana de pura cepa. Desde la raya del pelo hasta los talones que volaban sobre la guitarra de su padre, El Chino. [...] De pronto, un brinco. Y la gitanilla bailaba. Lo indescriptible. Alma, alma pura. El sentimiento hecho carne. El tablao vibraba con inaudita brutalidad e increíble precisión. Como todos los gitanos, La Capitana ya debía haber nacido bailando. Era la antiescuela, la antiacademia y lo que más honda impresión causaba era su nervio, que la crispaba en dramáticas convulsiones, su sanfre, su violencia, su impetuosidad de bailaora de casta." [...]

Vicente Escudero no se equivocó al vaticinar la innovación que la Amaya aportaría al baile de mujer: 
        "Esta gitanilla hará una revolución en el baile flamenco, porque es la síntesis de dos grandes estilos fundidos genialmente: el de la bailaora antigua, de la cintura a la cabeza, con un braceo imponderable y ese raro fulgor de sus ojos, y el estilo trepidante del bailaor en sus variaciones de pies, prodigiosas." [...]

La primera vez que la vi actuar en vivo fue en Sevilla, en el Teatro Cervantes, cuando regresó de América en 1947. Se presentaba con el Bolero de Ravel y se vestía de pantalón, cosa que en Sevilla chocó bastante. Entraba bailando por una rampa del lado derecho del escenario hasta llegar al centro, donde la esperaba un gran tambor sobre el que seguía machancando a Ravel. [...] Como casi siempre estaba fuera de España, no la volví a ver hasta 1959, en el Palau de la Música Catalana, cuando vino para la inauguración de la fuente de Carmen Amaya en la Barceloneta. Esa actuación, si mal no recuerdo, se hizo a beneficio del asilo de San Rafael. En esa ocasión se presentó con El embrujo del fandango, de José María Palomo, luciendo aquel traje verde y oro, de corte torero, con el que la inmortalizó el pintor mexicano Ruano Llopis en el cartel publicitario que dio la vuelta al mundo. El teatro se venía abajo, formó un verdadero alboroto. Jamás se ha conocido un éxito igual en el Palau de la Música. Al año siguiente la volví a ver en el Théatre de L'Étoile de París, coincidiendo con una de mis actuaciones en la Sala Pleyel. [...]




Siempre se había hablado de la escuela flamenca sevillana, granadina o gaditana, pero nunca de la escuela flamenca catalana, habiendo nacido en Barcelna uno de los grandes monstruos sagrados del baile flamenco. Ella bailaba completamente diferente a todas las demás. La Amaya te hacía olvidar ese estilo grandilocuente que impera en las bailaoras del sur. Así como las andaluzas tiran los brazos hacia atrás y pasean el baile braceando hacia fuera, Carmen hace todo lo contrario, los brazos hacia dentro, como los bailaores farruqueros, por eso su baile está cargado de ese andrógino sex appeal, sin que por ello en ningún momento pudieras pensar en una ambigüedad masculina.

[Texto original de José de la Vega (2009) en El Flamenco que viví, Barcelona: Viceversa singular, pp. 173-176]





BORRULL, Concha. Bailaora. (Valencia,1906- Barcelona,1983). 
Hermana del guitarrista Miguel Borrull. Actuaba asiduamente en Barcelona, en el Alhambra Borrull, el Novedades, el Tívoli, el Victoria y el Novedades en 1929; en el Circo Barcelonés el 10-2-31 en homenaje a Manolillo de la Rosa y el 10-11-31 en beneficio de Juan Bulerías. También actuó en la despedida de Lola Cabello en el Nuevo 19-5-33, el 21 en el Barcelona. Estrenó El amor brujo con Laura de Santelmo en el Liceo en noviembre de 1933. Actuó en el Pueblo Español el 14-4-34, en el Circo Barcelonés el 14-6-34, en el Golf Pedralbes el 21-7-34, en la comedia La zambra de Chorrojumo en agosto del 34, en el Circo Barcelonés el 4-4-35 en el homenaje a Viruta, el 14-5-36 y el 18-6-36, y en la Verbena de la Prensa en Montjuïc el 23-6-36.

[Texto original de Montse Madridejos Mora  (2012) en El Flamenco en la Barcelona de la Exposición Internacional 1929-1930, p. 402, Barcelona: Edicions Bellaterra]



"En 1954, Concha Borrull me invitó junto con la gran bailarina Leonor María, que alumna suya, a ir a su escuela porque iba a recibir a un personaje muy importante que venía de los Estados Unidos y quería presentarnoslo. El visitante resultó ser el famoso maestro de baile Eduardo Cansino, padre de la estrella cinematográfica Rita Hayworth. Bailamos para él unas sevillanas, culminando esta fiesta con el lujo de su hermano, el guitarrista Miguel Borrull, acompañándome por soleá"

[Texto original de José de la Vega (2009) en El Flamenco que viví, p. 168, Barcelona: Viceversa singular]


BORRULL, Trini [Trini Flandorfer Borrull]. Bailaora, bailarina de clásico español y coreógrafa (Madrid, 1914- Las Palmas de Gran Canaria, 2006). Hija de Lola Borrull, la única hija de Miguel Borrull Castelló que no se dedicó al baile por timidez, todo y que aprendió guitarra clásica con Tárrega, estudió danza clásica con Pauleta Pàmies, escuela bolera con Ángel y Luisa Pericet en Madrid y flamenco con el bailaor sevillano "El Estampío" y su tía Concha en Barcelona. Fue descubierta por el especialista en danza Alfonso Puig Claramunt, que la presentó a Joan Magriñá, con quien hizo su debut en el Teatro del Liceu con el ballet Corrida de feria la temporada 1938-39 y actuó en un Tango flamenco y la Danza del fuego en el Palau de la Música el 1939. En 1942 se independizó de Magriñá y coreografio e interpretó diversos solos de danza como Mallorca, Valenciana y Málaga, Fandango corralero, o Molondrón que estrenó en el 1943 en el Palau de la Música de Barcelona; también creó su propia compañía de danza que debutó en el Teatre Calderón de Barcelona. En 1944 fue coreógrafa del Teatre del Liceu de Barcelona y montó diversos ballets hasta que en 1949 se trasladó a Las Palmas de Gran Canarias donde continuó su tarea de profesora, bailarina y coreógrafa; desde su academia de danza, compaginó su labor docente con el montaje de ballets como El amor brujo, El bolero de Ravel o Capricho Español. En 1986 fue nombrada coordinadora del programa de danza por el Congreso de Cultura Canario y colaboradora del Instituto de la Escuela de Folklore de Las Palmas y del Consejo Asesor de la Dirección General de Cultura, cárgos que le han llevado a dar conferencias por todo el mundo.

[Traducido del catalán, texto original de María Jesús Castro (2003) en Història de la Música Catalana, Valenciana i Balear. Volum IX Diccionari A-H. p. 102, Barcelona: Edicions 62]




Trini Borrull
http://www.papelesflamencos.com/2009/10/la-saga-de-los-borrull.html




[...] La que llegó también a ocupar el envidiado puesto de primera bailarina del Gran Teatro del Liceo de Barcelona, se inició en la danza con Pauleta Pàmies a muy temprana edad. Su vocación por la danza española la llevó más tarde a Madrid, a estudiar con los más grandes maestros del momento: Julia Castelau, Paco Reyes, El Estampío, Ángel Pericet y Luisa Pericet. El baile flamenco lo llevaba muy arraigado por la trayectoria familiar y los bailes folclóricos los estudió en sus propias fuentesEn 1936 debutó en los espectáculos de variedades de Barcelona, donde los más prestigiosos críticos vislumbraron en ella a una gran estrella de la danza. [...] Trini nos dejó el pedagógico libro La danza española, publicado por Manuales Meseguer en 1981.

[Texto original de José de la Vega (2009) en El Flamenco que viví, Barcelona: Viceversa singular, p. 199]



CAMISONA, La  (Málaga, 2ª mitad s. XIX-s. XX). 
Durante los primeros años del siglo pasado vivió en Barcelona donde nació su hijo, el guitarrista Paco Aguilera. Fue figura destacada de los cafés cantantes de su tiempo, alternano con las más importantes figuras de la danza flamenca.
Fernando el de Triana la describió así:
El arte de bailar, en la mujer, ya sabemos que no es más que gracia en la figura, acompasados movimientos y un aire especial en la colocación de los brazos. Todo eso forma un conjunto armonioso, más destacado si la bailaora es de raza faraónica, pues las mujeres de esta raza se prestan más a las raras contorsiones que este baile requiere. Y esta es la simpática gitana malagueña motivo de esta semblanza, la que reúne todas las cualidades antedichas, por lo cual, Teresa La Camisona está reconocida como gran bailaora puntera.
En 1918 trabajaba La Camisona en el Kursaal sevillano junto a su paisano el Cojo de Málaga, El Niño Gloria, La Pompi, La Posaera, La Malena, Juanito Mojama, El Estampío, Rafael Ortega, Ramón Montoya y Antonio Moreno, entre otros.

[Texto original de Gonzalo Rojo Guerrero  (2004) en Mujeres Malagueñas en el Flamenco, Sevilla: Ediciones Giralda, p. 72-73]



CHICHARRA, Concha La  (?). 
Bailaora catalana que cuando interpretaba El Crispín, un baile cómico que solían hacer los gitanos catalanes, se iba quitando, uno a uno, los vestidos hasta quedarse en enaguas.

[Texto original de José Luis Navarro García  (2003) en El Ballet Flamenco, Sevilla: Portada Editorial, p. 16]



ESCUDERO, Vicente [Vicente Escudero Uribe]. Bailaor y coreógrafo (Valladolid, 1888). Se crió entre gitanitos, aunque él no era de descendencia gitana. [...] Sería París la ciudad que lo veria triunfar en la década de 1920. Los inicios en la ciudad de la luz no fueron fáciles para él, pero el primer premio de un concurso internacional de baile en el Teatro de la Comedia le abrió definitivamente las puertas de los escenarios de la capital francesa. Sería precisamente en París, en el Teatro Olympia, donde conocería a Carmita García, que habría de convertirse en su pareja artística y sentimental durante cuarenta y cuatro años.
Influido por la pintura cubista y surrealista de sus amigos Picasso, Miró, Juan Gris, Fernand Léger, Metzinger, etc. con los que se codea en los cafés de París Escudero crea su espectáculo, Bailes de vanguardia, y lo presenta en el Teatro Novedades de Barcelona en 1930; al inicio de la década en la que obtendría también sus mayores éxitos en Nueva York. [...]





Es en el teatro Novedades donde le ve bailar por primera vez el escritor y crítico Sebastián Gasch. A partir de esta fecha se establece entre ambos una estrechísima amistad, que duraría cincuenta años. 
Vicente Escudero fue el creador del baile por seguiriyas, de ese cante amargo y desgarrao, [...] Más tarde, Pilar López le agrega el toque de las castañuelas. [...]

En 1947, la Editorial Montaner y Simón le publica su libro Mi baile. Muy elocuente, didáctico y con ocurrentes anécdotas, y que él dedica al arte de la genial bailarina Antonia Mercé, La Argentina, por la que siempre sintió una gran admiración. [...] En 1925, La Argentina contrató a Escudero para que interpretara el papel de Carmelo en El Amor brujo. [...]

En diciembre de 1951, Escudero da a conocer en el club literario barcelonés El Trascacho su decálogo sobre el baile flamenco puro, al que más tarde llamaría Decálogo sobre el baile flamenco masculino. [í...] 

Después de la última actuación de Vicente Escudero y Carmita García en Nueva York, en 1961, el bailaor reaparece en 1964 con María Márquez en los Festivales de la Plaza del Rey de Barcelona, que es donde lo veo bailar por primera vez. [...] Quiero dejar constancia de esa noche de presentación de Vicente Escudero en el tablao Los Tarantos, donde se respiró un ambiente que rozaba lo litúrgico. [...]

Vicente Escudero falleció el 4 de diciembre de 1980, cobijado en casa de María Márquez desde la muerte de Carmita García el 29 de septiembre de 1964. 

[Texto original de José de la Vega (2009) en El Flamenco que viví, Barcelona: Viceversa singular, pp. 47-67]



GITANA, Dora la [Antonia La Sillera] (Málaga, s. XIX-s. XX). 
[...] Siendo aún joven se marchó de su Málaga natal. Fue también conocida artísticamente por el sobrenombre de Dora La Gitana y llegó a alternar con destacadas figuras del flamenco, el cuplé y otros especialistas escénicos. Entre los años 1905 y 1910 bailaba en Barcelona, en La Gran Peña, junto a su paisana Elisa Romero y a Enrique Lara interpretando su célebre garrotín que tan famosa la hizo. En aquel local barcelonés triunfó también el cuplé con las excelentes Raquel Meller y Antonia La Cachavera. Parece ser que continuó toda su vida artística en Barcelona y allí falleció alrededor del año 1930.

[Texto original de Gonzalo Rojo Guerrero  (2004) en Mujeres Malagueñas en el Flamenco, Sevilla: Ediciones Giralda, p. 51]


JOSELITO, Concha La [Carmen Gómez] Bailaora. (Cartagena (Murcia), 1906-?. 1998).
Siendo apenas una niña su familia se trasladó a Barcelona. Desde muy joven siente el aguijón del baile flamenco y frecuenta los cafés de cante barceloneses. Ve bailar a La Macarrona y a Antonio el de Bilbao e intenta seguir sus pasos. Actúa en el Villa Rosa, se casa con el guitarrista Juan Relámpago y marcha a Madrid. Allí trabaja en el Kursaal Imperial, en el Teatro Romea y en el Teatro Goya. Llega a París para incorporarse a la compañía de La Argentina, con la que actúa, en 1929, en el Teatro Fermina y en la Ópera Cómica. Cuando termina su contrato con Antonia Mercé se queda en la capital francesa, monta academia de baile, da recitales, interviene en diversos ballets y realiza algunas giras por capitales europeas y americanas, llegando a visitar Australia. [...]

[Texto original de José Luis Navarro García  (2003) en El Ballet Flamenco, Sevilla: Portada Editorial, p. 80-81]



MALAGUEÑA, Encarna la [Encarnación Hurtado] Bailaora (Málaga, s. XIX-s. XX). 
Por los años treinta actuaba en Casa José María, un local de lo más castizo del barrio andaluz de Barcelona, situado concretamente en la calle Espalter, la bailaora Encarnación Hurtado, artísticamente conocida por Encarna la Malagueña.
Fue creadora de una farruca y un garrotín que alcanzaron gran popularidad, y que Pastora Imperio interpretaba en el Salón Actualidades de Madrid, al que pasó tras su debut en el Salón Japonés.
Sebastián Gasch hace el siguiente retrato de ella:
"Encarna la Malagueña es una epilética, su cuerpo se agita y se convulsiona constantemente, animado de un sobresalto continuo que le producen los nervios cuando baila, toda ella es un muñeco mecánico, con arranques bruscos y violentos, rimados mecánicamente. Un muñeco mecánico escalofriante, que en lugar de muelles, tiene u alma dolorida"
Con anterioridad, en 1914, participó en el elenco de El embrujo de Sevilla, espectáculo coreográfico que estuvo en el Teatro Alhambra de Londres encabezado por La Argentina, y en el que figuraban importantes nombres del género flamenco más genuino: Faíco, Antonio el de Bilbao, el Maestro Realito, Lolilla La Flamenca y María La Bella, entre otros; más tarde actuó con Enrique de Lara en el Café Recreo de los Campos, de Jaén, en la primera salida que hizo a provincia el bailaor madrileño.
Encarna la Malagueña fue también conocida artísticamente como La Malagueñita.

[Texto original de Gonzalo Rojo Guerrero  (2004) en Mujeres Malagueñas en el Flamenco, Sevilla: Ediciones Giralda, p. 126, 127]


MALERAS, Emma [Emma Maleras Gobern] (Ripollet, 1919-Barcelona, 2017) Bailarina de danza clásica, escuela bolera y flamenco. Concertista de castañuelas.
Conozco a Emma Maleras en el verano de 1953. Emma regresaba de una tournée por Egipto y necesitaba un bailarín para su ballet, me hizo una pequeña prueba y se quedó conmigo. Actuamos en la sala de fiestas El Cortijo. Volvimos a encontrarnos en esta misma sala en 1956, después de mis estancias en la India con Leonor María y en el Ballet de Pilar López. A partir de entonces su nombre y el mío van unidos en muchos carteles, y según Emma Maleras, la parte más importante de su carrera la hizo a mi lado.
En el año 1957 formo mi propia compañía y contrato a Emma Maleras como artista invitada para una tournée con las Juventudes Musicales de Francia. Bailamos en gran número de teatros municipales y de ópera de Francia, Luxemburgo, Marruecos, Túnez y Argelia, en los que Emma obtiene un gran triunfo como bailarina y bailaora. Estos recitales tuvieron tanto éxito que fueron prorrogados sistemáticamente por cuatro años.





En este nuevo período se observa en Emma la influencia que han tenido en ella las coreografías de Antonio y de Pilar López. De mejores fuentes no podía beber. También tuvo la oportunidad de ver bailar a Antonia Mercé La Argentina, y dice que ese grafismo le quedó para siempre indeleble, y que le influyó muchísimo en su formación. Emma reconoce asimismo su aprendizaje del maestro Juan Magriñá, puesto que formó parte de varias coreografías suyas en el Gran Teatro del Liceo. Para ampliar sus conocimientos de baile, se marcha a Madrid y estudia flamenco con El Estampío, La Quica y Regla Ortega, y también la escuela bolera con la saga de los Pericet. Emma me contaba lo que había disfrutado en Italia en la Ópera de Bari, montando la coreografía de El Amor Brujo y La Vida breve, de Manuel de Falla, y que también ese éxito se repitió en Alemania, en el Festival de Primavera de Wiesbaden. Y llegamos a las dos temporadas del Teatro Candilejas, 1958 y 1959, que es cuando Emma Maleras obtiene su mayor éxito. Todos los críticos de aquella época coincidían en elogios. [...]. En 1960, Emma Maleras, artista inteligente, sabe retirarse a tiempo. Y es a partir de entonces cuando se entrega totalmente a la elaboración de su maravilloso Método de Castañuelas, el sistema de enseñanza que aún imparten sus laureadas alumnas en ese imperio que ella ha creado y que ha dado nombres tan importantes como los de Consol Grau e Inmaculada González, grandes concertistas de castañuelas que se formaron con ella y han continuado su magisterio"

[Texto original de José de la Vega (2009) en El Flamenco que viví, p. 207, Barcelona: Viceversa singular]




RAYITO DE MADRID (Valladolid, ¿?- ¿?). En Barcelona conoció a Vicente Escudero y a Sebastià Gasch, cultivando la amistad de ambos. El crítico lo incluyó en la categoría de artistas impresionantes y escribió de él que era "Serio, seco y duro, sobrio y austero, como dicen en el paisaje castellano. Su preocupación capital es la línea. [...]" Durante los años treinta actuó con frecuencia en Barcelona y alrededores, logrando notoriedad y siendo figura habitual en sus locales. En 1935, por ejemplo, actuó en El Farolillo del Hotel Ritz, en Barcelona de Noche y en el Gran Kursaal. 

[Texto extraído de Francisco Hidalgo Gómez (2001), Cornellà Flamenco, Barcelona: Ajuntament de Cornellà de Llobregat, p. 28]



ROMERO, Elisa  Bailaora y canzonetista. (Málaga, último tercio s. XIX-s. XX).
Como bailaora consiguió mucha popularidad en Barcelona donde debutó el año 1903 en el teatro Novedades, pasando poco después a la Gran Peña, establecimiento que tuvo mucha actividad flamenca en los primeros años del siglo XX, y donde trabajó Elisa Romero junto a Enrique Lara y su paisana La Sillero. Posiblemente, y dada su dualidad de bailaora y cancionetista, actuaría también en este mismo local por aquellos años como cantante de cuplés con Raquel Meller y Antonia la Cachavera, asiduas y triunfadoras de la Gran Peña.
El mismo año de su debut en Barcelona y según información que facilita el Diccionario Enciclopédico Ilustrado del Flamenco, apareció en la revista Vida Galante, firmada por Zamacois, una semblanza de su personalidad artística, de la que se reproduce el siguiente párrafo:
"Hemos visto bailar a Elisa Romero peteneras, tangos, caracoles, soleares de Arcas...y la imagen de la España clásica, de la poética Andalucía, soñadora, voluptuosa y triste, revivió nuestra memoria...Todo en ella obedece a un ritmo prodigioso: el movimiento que iniciaron las caderas, lo terminan los brazos. Dicen que Elisa Romero se va a Paris.
Como era habitual, o al menos bastante frecuente en muchos artistas españoles de aquella época, el año 1909 Elisa Romero también cogió las maletas y viajó para hacer las Américas donde, al parecer, cosechó importantes triunfos en Argentina, Chile, Uruguay, Cuba y otros países.

[Texto original de Gonzalo Rojo Guerrero  (2004) en Mujeres Malagueñas en el Flamenco, Sevilla: Ediciones Giralda, p. 267, 268]




UDAETA, José de  [José Luis de Udaeta]. Baillarín de clásico español, bailaor, pedagogo, conferenciante y escritor (Barcelona, 1919-2009). Estudió danza clásica con Joan Magriñá y Olga Preobajenska, A. Volinine y Boris Kniasseff, escuela bolera con Rafael y Luisa Pericet, y flamenco con Francisca González Martínez "La Quica", Juan Sánchez "El Estampío", Enrique Jiménez "El Cojo" y Regla Ortega. Comenzó su carrera como bailarín clásico, y, después de colaborar con La Quica en diversos espectáculos, del 1949 al 1970 formó pareja con Susana Audeoud como Susana y José, actuaron en los principales teatros del mundo e incorporaron a los ballets clásicos estilos puros flamencos con coreografías como Orfeo gitano (1951), Catalanesca (1956), Romance de Carmen y don José (1958), La Celestina (1966) y Capricho de Goya nº 75 (1967). En 1958 inició su tarea como profesor titular de baile español en la Internationale Sommer Akademie des Tanzes en Colonia, y también ha impartido clases magistrales en el Musikhochschule de Viena, en el Conservatorio y la Ópera de Estocolmo y en los de Copenhaguen y Zuric. En 1970 se retiró como bailarín y comenzó a estudiar las castañuelas con Emma Maleras, y en 1976 ofreció su primer concierto en la Liederhalle Mozartsaal de Stuttgart. En 1978 acompañó a Montserrat Caballé en la interpretación de arias de compositores españoles en la Scala de Milán, en el Covent Garden y en el National Theater de Munic. Como coreógrafo ha colaborado en la creación de diversos ballets en el Festival Internacional de Salzburg en 1985, en el Real Ballet Danés en 1978 y en la Ópera de Berlín, entre otros. Experto conferenciante, ha publicado un estudio ilustrado y documentado sobre el baile flamenco en 1964, así como un libro sobre las castañuelas donde muestra su colección particular.
OBRA. J. Udaeta (1989): La castañuela española: origen y evolución, Barcelona.
BIBLIOGRAFÍA. A. Puig Claramunt (1977): El arte del baile flamenco, Barcelona; P. Llorens, X. Aviñoa, I. Rubio (1987): Història de la dansa a Catalunya, Barcelona; Carlos Murias (1995): José de Udaeta, 50 años en escena; DEIF; HMCVB (VII 162).

[Traducido del catalán, texto original de María Jesús Castro (2003) en Història de la Música Catalana, Valenciana i Balear. Volum X Diccionari I-Z. pp. 241-242, Barcelona: Edicions 62]








VIRUTA, Antonio el  (Madrid, ?-Barcelona, 1964). 
Bailó principalmente en los cafés de cante catalanes, durante las décadas de los diez y los veinte del pasado siglo. Después de pertenecer a la compañía de La Argentina, figuró también en la de Carmen Amaya. Tuvo que dejar el baile al tener que amputarse una pierna.

[Texto original de José Luis Navarro García  (2003) en El Ballet Flamenco, Sevilla: Portada Editorial, p. 81]



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